jueves, 11 de diciembre de 2008

Más allá de Rangún

Decidimos encaminarnos hacia Pulau Pinang para pasar el fin de semana. Intentar comprar billetes el día 4 para el tren-cama del día 5 no dio ningún resultado, así que a las 6 de la tarde nos encaminamos hacia la estación de buses de Puduraya. El caos. Resultaba que el lunes era día festivo en Malasia -no para el personal de la embajada- así que toda la ciudad intentaba huir O_O Ahí estuve seguro de que íbamos a organizar una 'operación fracaso' típicamente nuestra, porque no veía nada claro que hubiese billetes para salir "aquí-ahora-ya!". Resultó que , pero claro, tuvimos que esperar 1 horita en el andén. Bueno, mentira... El mismo hombrecillo que nos dio un billete rumbo a Johor Bharu -en dirección contraria-, nos sacó a la avenida principal, Jalan Pudu, y ahí nos tuvo esperando 1 hora tragando humos hasta que apareció la chanchera de bus en que debíamos ir.

La chanchera con tele-agujero
El viaje debía durar unas 5 horas, peeero, como tardamos 2 en lograr abandonar la capital, acabamos tardando 7. Que sumado a la hora de retraso de salida porque los buses no conseguían llegar del atascazo... Pasadas las 2 de la mañana fue cuando llegamos a Penang xDDD Por el camino tuvimos que correr a una gasolinera a por provisiones que nos salvasen la vida, porque ya veíamos que no habría ningún sitio abierto para cenar a nuestra llegada. Y qué llegada. Inocente de mí, yo pensando que el bus nos dejaría en el centro de Georgetown, la principal ciudad de la isla. Pero por qué molestarse en ir tan lejos pudiéndonos dar la patada nada más cruzar el puente?!? Así que nos tocó coger un taxi para recorrer los 10 km. que nos separaban de nuestro hotel, que no era uno cualquiera. Lo elegimos porque el hotel había servido de lugar de rodaje para algunas escenas de la película "Más allá de Rangún", así que supusimos que sería un sitio con encanto... ^_^

Cuando llegamos, va el taxista y nos suelta que "está cerrado" O_O "¡Cómo que está cerrado!. Es un hotel. Los hoteles no cierran!". Efectivamente, ahí había luz al fondo de la recepción. Llamamos al yayo que estaba montando guardia en recepción, que vino cojeando hasta nosotros para soltarnos un: "Está lleno" ¬_¬ Qué crucecita de noche... Todos con ganas de andar tocando los cojones a las 3 de la mañana... "Tenemos una reserva". Va a mirar y dice que no hay ninguna reserva y que está lleno. Yo, obviamente, no me iba a quedar tirado a las 3 de la mañana en la calle después del viajecito infernal que llevábamos, así que le dije que era imposible que alguien hubiese cogido nuestra habitación si habíamos dicho que llegaríamos sobre la medianoche! Yo creo que el hombre ya pensó que, total... estaba despierto, así que podía ganar unos eurillos, y nos dijo que entrásemos. La verdad que el hotel era chulísimo, pero yo no estaba para apreciarlo en todo su esplendor porque tenía que luchar contra la momia. Estuvimos buscando la reserva a nombre de Luis, pero nada. Así que nos comenta, como haciéndonos un favor: "Os voy a dar una habitación que había reservada pero que finalmente no han venido..." O_O "A lo mejor es que somos nosotros los de la reserva, mamón!!!". @#!¿*$%#!.

En fin... La habitación definitivamente era digna de Más allá de Rangún, pero yo creo que de la parte en que la metían en prisión... xDDDDD

Polvo de estrellas
Optamos por fotos artísticas para no herir la sensibilidad xDDD Por lo menos transmitía esencia del sudeste asiático ^_^ Luis temía que nos levantásemos con piojos o pulgas, pero finalmente ninguna criatura hizo acto de aparición. Además hay que decir que, una vez de día, el hotel ganaba mucho y ya se entendía por qué lo habían elegido como lugar de rodaje ;)

Esto ya es otra cosa...
Al día siguiente, tras un inexistente desayuno, fuimos a comprar el billete de vuelta a la civilización -sólo teníamos el de ida-. Nos tocó otra mente preclara. Empecé a sospechar que era un problema endogámico de la isla... Le pedimos un billete de vuelta para el domingo por la tarde, y nos dice que sólo quedan a las 0800 de la mañana O_O "WHAT !?! ¿No hay nada más tarde?" "A las 2300" "WHAT !?! ¿No hay nada entre medias?" "Bueno, hay uno a las 1000" "Pero vamos a ver... por la tarde, después de comer!" "¿El de las 1530?". Lela perdida... Tuve que preguntarle todas las horas para asegurarme de que no había más buses de los que no me quisiera hablar la muy inmunda!.

La lucha del hombre contra el tigre, o mi lucha contra esta panda de lelos!
Para recuperar mi punto zen, decidimos marchar en busca de las únicas teóricas playas decentes de la isla. Cómo no, junto al faro xD Así que allá que nos adentramos en la selva para una caminata de 3 horas?!? No problemo! Pero sí que lo hubo... El problema vino porque saltamos corriendo del bus para huir de un palestino de lo más cansino -y además de dientes marrones- que nos estaba dando la turra en el bus, así que nos adentramos en la selva sin haber comido en todo el día, sin comida, y con medio litro de agua para los 2 xDDD

Felices antes de adentrarnos en lo desconocido
Dispuestos a enfrentar todas las dificultades con tal de escapar del azote palestino, seguimos adelante. Después de horas, atravesar playas, plantearnos beber el agua salada...

Es agua al fin y al cabo, ¿no?
Nos cruzamos con unmatrimonio todo sudoroso que procedió a informarnos de que el faro estaba cerrado! xDDDDD Luis colapsó ante semejante noticia, así que hubo que dar media vuelta, no sin antes arrancarle un descanso de 5 minutos para hacer un poco el mongo -ya que estamos...-.

Cuánta felicidad!
Comimos en un andrajo de sitio recomendado por mi guía -en qué estaría pensando el tarado que escribió la referencia- donde nos sentimos estafados, pero nunca el zumo de sandía me supo mejó ;) Y de ahí al baño más allá de Rangún, y a disfrutar de la noche de Georgetown.

La ciudad de la luz
Había algún tipo de festival así que tuvimos música en directo y muy buen ambiente. Y además encontramos una auténtica joyita de sitio donde cenar, el "Salsas". Precio muy competitivo y calidad híperrr-excelente! Una cena de 5 platos: crema de zanahoria, costillas... Yo me sentía en el restaurante de Ratatouille, todo me daba ganas de llorar de lo bueno que estaba -sin comentarios las caras de Luis-. Hasta felicitamos al chef que se asomó -junto con todos los camareros- a ver a quién había conseguido emocionar tanto... xDDDDD

Al día siguiente, disfrutamos de un contundente desayuno -hay que aprender de los errores-, y nos dirigimos a ver la parte del muelle y los templos de la ciudad que nos quedaban por ver.

Disfrutando del frescor en los templos restaurados
Qué calorrrrr... Tuvimos que acabar claudicando y sentarnos en una terraza bajo los ventiladores para tomar algo fresquito que nos repusiese... Además, aprovechamos para subir a la Komtar a disfrutar de las vistas panorámicas de la ciudad antes de marcharnos, porque la torre está situada justo encima de la estación de buses, con lo que pudimos pasarnos antes de montar en el bus de-lux.

El puente más largo de Malasia -al fondo, sobre el mar-
Me pasé la vuelta leyendo junto a la ventana hasta que se hizo de noche, y como estos buses ninguno tiene luz -debe ser que la lectura aquí no es muy popular-, estuve hablando con Luis el resto del viaje. Y todo encima para llegar y, sin ducharnos, ni dejar la mochila, ni ná, tener que salir disparados hacia la despedida de Manuel, que nos dejaba para regresar a España, véase mi dolor... :'(

Sufro!

2 comentarios:

  1. Niño, tú no eres normal, pero ¡gracias a Dios que es así!

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  2. Jaja que aventuras, esos viajes son al final los mejores!! que misterio tiene hacer un viaje en el que llegas al hotel y te dan la habitación que tenias reservada! o que lo que vas a visitar este abierto...

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